La anunciada visita de la jefa de la agencia antidroga de Estados Unidos (DEA), Michelle Leonhart, a República Dominicana, por primera vez, tendría como objetivo fundamental exigir las extradiciones de empresarios, funcionarios y militares que desde gobiernos anteriores y en el actual han sido protegidos aquí, según informó a DominicanosHoy una fuente de entero crédito

La llegada de Michelle Leonhart tiene lugar días antes de la toma de posesión del electo Presidente de la República, Danilo Medina, y se produce 15 días después de otra que realizó al país la secretaria de Justicia estadounidense, Janet Napolitano, en virtud de las serias preocupaciones por la conversión del territorio dominicano en uno de los puentes más importantes para el tráfico de drogas en el Caribe, desde donde ha fluido gran cantidad de estupefacientes que utilizan los consumidores en los Estados Unidos y Europa.

En horas de la tarde de este viernes, fecha de su arribo, la jefa de la DEA tiene previsto reunirse con el asesor del Poder Ejecutivo en materia de Drogas, Marino Vinicio Castillo; el ministro de las Fuerzas Armadas, teniente general Joaquín Virgilio Pérez Féliz, y el presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), mayor general Rolando Rosado Mateo.
Posteriormente, la funcionaria será reconocida por el presidente Leonel Fernández en una ceremonia que tendrá lugar en el Palacio Nacional.

En informe reciente, EEUU ubica a República Dominicana en la lista de 22 países considerados como grandes productores de sustancias narcóticas o usados para su tránsito, en el cual incluye, además, a Afganistán, Bahamas, Belice, Bolivia, Birmania, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, India, Jamaica, Laos, México, Nicaragua, Pakistán, Panamá, Perú y Venezuela.

La inclusión en la lista responde a “una combinación de factores geográficos, comerciales y económicos que permite el tránsito o producción de drogas”, pese a las medidas que tome el Gobierno en cuestión para combatir el narcotráfico, explicó el comunicad